El gaditano Álvaro Cepero tiene muchos motivos para sonreir. Tras la operación a la que se sometió a finales del pasado año para eliminar la plica rotuliana en su rodilla izquierda, ahora puede volver a sentirse jugador de pádel.
El andaluz ha querido demostrar que las largas sesiones de fisioterapia y el seguir las recomendaciones de los profesionales le han servido y mucho, y que su cuerpo y su rodilla se han fortalecido y están listos para dar el siguiente paso.
Hemos podido ver a Cepero en su hábitat natural, en una pista de pádel, tocando bola, y demostrando que no tiene dolor en los apoyos y desplazamientos tanto laterales como en avance y retroceso, una noticia estupenda.
Ojalá le podamos ver subiendo la intensidad poco a poco pero el primer paso está dado y seguro que le llena de confianza y motivación para los siguientes. La luz del final del túnel está cada vez más cerca para ‘Chiqui’.
¡A seguir mejorando!
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