Padel Spain .- No es ningún secreto que Juan Martín Díaz y Fernando Belasteguín llegaron a La Reserva del Higuerón con muchas ganas… Y no sólo por sus dos derrotas en las semifinales de Alicante y de Marbella sino, también, por su firme propósito de acallar todas aquellas voces que ya comenzaban a rumorear que no eran los mismos, que empezaban a ser más asequibles para sus rivales y que sufrirían en la recta final de la temporada. Si ya de por sí suelen ser imparables, cuando además afrontan una cita con tanta motivación, se convierten en unos rivales imbatibles.
Con paso firme, partido a partido y adversario a adversario, Juan y Bela dieron una lección de veteranía, de temple y de seguridad para llegar hasta la gran final, superar en un encuentro épico a Pablo Lima y Juani Mieres (7-5 y 7-6) y conquistar su sexto título de la temporada, quinto en tierras españolas.
¿Han vuelto las aguas a su cauce? Parece que sí. Ante el numeroso público que llenó por completo las gradas del popular recinto costasoleño, los Reyes sacaron a relucir sus galones e impusieron su ley en un duelo espectacular, repleto de emoción y alternativas de principio a fin.
El inicio fue muy igualado. Ninguna de las dos parejas consiguió hacerse con el control del juego y dicho equilibrio se mantuvo hasta el undécimo juego, justo el momento en el que los actuales números 1 del Mundo rompieron el servicio de Juani Mieres y obtuvieron una ventaja decisiva. Sin acusar la presión, Bela mantuvo su saque y, con ello, se apuntaron la primera manga por 7-5.
Sin acusar el duro golpe recibido, los Príncipes dieron una muestra de carácter y no bajaron los brazos en ningún momento. Con mucha fortaleza mental, apretaron los dientes, intentaron hacerse fuertes en la red e hicieron todo lo posible por enviar el choque a la tercera y definitiva manga.
Sin perder sus servicios, el segundo parcial llegó a un apasionante tie break en el que pudo pasar cualquier cosa. Lima y Mieres querían que su sueño renaciese mientras que Juan y Bela buscaban aumentar su palmarés. Fue una muerte súbita vibrante, en la que Pablo y Juani trataron de aumentar la intensidad de su juego pero en la que la experiencia y el talento de sus oponente fue clave. Díaz y Belasteguín no sólo aguantaron los envites sino que, además, cerraron la final con un tanteo de 7-4 en el tie break.
Seis títulos de nueve posibles… Una vez más, la rotundidad de sus números, la imagen ofrecida dentro de la pista y su facilidad para solventar situaciones complicadas vuelven a demostrar que estos Reyes no tienen ninguna intención de bajarse de su trono.
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