Mapi y Majo Sánchez Alayeto no tuvieron excesivos problemas para sobreponerse a la ilusión con que llegaban Cata Tenorio y sobre todo Bea González a esta cita. Las números 1 del ranking demostraron que están muy fuertes y que el tiempo de descanso y preparación lo han exprimido al máximo.
Con unas cuantas revoluciones más empezaron carburando las Atómikas, conscientes de que si el partido se volvía igualado, sus rivales crecerían y se lo harían pasar mal y por eso quisieron cosechar breaks desde el inicio, buscando tranquilidad y asentamiento en la pista y ello provocó que el primer parcial fuese a toda pastilla, con las mañas enrachadas, optando por bandejas muy ofensivas que echaran para atrás a Bea y no pudiese sacar a relucir su versión letal en la red.
Cata y ella se defendieron como pudieron pero cuando quisieron darse cuenta ya habían cedido el primer envite y estaban en el banco intentando cambiar la dinámica, sustentadas por su entrenador, Manu Martín, quien les sugirió un cambio en la estrategia.
Así, al regreso a la pista, dieron un par de pasos hacia delante y activaron las piernas, moviendo la veterana argentina a las rivales de lado a lado, encontrando ahora sí huecos y logrando que Bea entrara más en juego y decidiera con su mayor envergadura.
Esto provocó una importante igualdad que se alargó hasta el tie break, donde Mapi y Majo volvieron a sacar su mejor versión impidiendo la igualada (2-6 y 6-7).
Despiden Tenorio y González la temporada, un gran año para ellas, que en 2019 tendrá continuación, seguro que también exitosa pero con un objetivo un poco más alto, colarse en más semifinales y, por qué no, entrar incluso en alguna final.
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