Durante el Mundial, vamos a contar con la opinión de Mauri Andrini, fundador y embajador de Hello Padel y capitán de la selección de pádel de Gran Bretaña, quien nos irá contando día a día el devenir de la competición así como otros aspectos más allá de los puramente deportivos.
Esperamos que os guste su ‘blog diario’ con el que cubriremos aún mejor este Mundial de Pádel que ya ha comenzado y que seguro que deja muy buenos momentos.
Os dejamos con la primera entrada y…¡mucho pádel!
Me está llamando mucho la atención el nivel de los jugadores del Mundial en todos los países. Todos los que están, incluido Australia o Japón, que llegan por vez primera a la cita, están con un nivel muy bueno.
Otros que estaban con un nivel bajito en la pasada edición han marcado una diferencia increíble, como es el caso de Alemania, Holanda, Bélgica, Reino Unido, Suecia… y tras ellos, están Francia, Italia y Brasil algo más cerca de Argentina y España.
A mí es algo que me pone, particularmente, muy contento, ya que muchos de los chicos que veo aquí son los que hacen mis cursos cuando voy fuera de España y estamos siempre en contacto, es algo que me enorgullece.
Más allá de la parte de competición, es de locos el calor que hace, tenemos 30º pero la sensación térmica es de unos cuantos grados más, por lo que los partidos que van entre las 10:30 de la mañana y las 3-4 de la tarde son muy pesados, muy cansados; los jugadores en estos días (lunes y martes) que suelen ser los más duros porque juegan todos los equipos y todos los del Open, tienen que jugar mínimo dos partidos al día, por lo que estos primeros días son cruciales.
Hay unos cuatro hoteles en los que se reparten los diferentes equipos, que distan unos 20 minutos del club, por lo que moverse es bastante sencillo. Hay dos clubes pero tienen un pero, ya que entre ellos hay un río que solo se puede cruzar por un puentecito bastante precario que te ahorra mucho tiempo pero por el que hay que cruzar con mucho cuidado, como Indiana Jones.
Respecto a la organización, siempre digo que cuando hay gente apasionada y con muchas ganas de trabajar, contempla cualquier error que pueda haber, y no lo digo porque haya encontrado algún fallo en la organización, sino porque a veces hay pequeñas cosas que dices »el transporte de los jugadores, el horario de la comida…» por lo que sea no funciona como debiera, algo de lo que se puede quejar cualquiera que no haya organizado un evento de esta magnitud, pero hay que felicitar a la organización, a la Federación de Pádel de Paraguay, que ha estado trabajando día tras día para que este campeonato se pueda llevar a cabo, máxime teniendo en cuenta que es un país en el que los recursos no son los que pudiera haber en otro país europeo. Un aplauso para ellos por lograr que los mejores jugadores del mundo hayan viajado hasta aquí para competir en esta cita.
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