Juan Tello y Fede Chingotto, dos »tapados» que han terminado por descubrirse del todo, y de qué manera. Dos argentinos muy jóvenes que se colaban en la final del Challenger de París ante los favoritos, con total merecimiento, y que en el último duelo del torneo ofrecían un rendimiento excelso. Ya son, oficialmente, campeones.
Todo ello tras un duelo extenuante que les ponía cara a cara con Ramiro Moyano y Lucho Capra, otros dos jóvenes que están en un gran momento de forma y que llegaban también con unos cuantos kilómetros en las piernas. Bien es cierto que el duelo de semis fue mucho más cómodo para Fede y Juan, pero en cuartos, estos sufrieron de lo lindo para superar a sus oponentes (Javier Martínez y Adrián Blanco (7-6, 6-7 y 6-2), por lo que la cosa estaba igualada en cuanto a distancia y pesadez de piernas.
Un duelo decidido por una sola cosa, el mayor depósito de gasolina de Juan y Fede, que les hizo volar en el tercero mientras que sus oponentes se iban quedando lentamente.
El resultado de 7-5, 6-7 y 6-2 deja bien clara la pelea que hubo por conseguir cada punto, por ganar un solo centímetro de la pista, por llevarse el título, siendo los aficionados presentes los que se llevaron una muy grata impresión del espectáculo que los jugadores y jugadoras pueden desarrollar.
El primer parcial consistió en una fugaz toma de contacto para pasar rápidaente ala shostilidades y jugárselo los cuatro en la parte final, donde un break favorable a la pareja más joven les puso en ventaja y les ayudó a no irse dle aprtido y cerrar este set a su favor.
En la reanudación, el golpe anímico no hizo descarrilar a Lucho y a Ramiro, muy metidos siempre en el choque y sufridores natos. En lugr de eso, subieron a lo más alto para, merced a una igualdad aplastante, marcharse al tie break donde fueron ellos los que lidiaron en esta ocasión con la diosa fortuna y esta les sonrió (6-7).
Todo por disputarse en el último y de nuevo los argentinos más jóvenes fueron los que decidieron, ante la »pasividad de sus oponentes», meterse a jugar y dar el 120% para poder levantar el título, pero no se dieron cuenta que, aunque vencidos, Moyano y Capra son de los que pelean y merecieron mucho más en este parcial que solo dos juegos, pero hay que comentar que la fortuna no les acompañó lo más mínimo y terminaron por entregar su primer título como pareja profesional de WPT a Juan Tello y Fede Ghingotto.
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