Esta vez sí se dio. En Madrid no pudo ser hace ahora justo una semana, hubo que viajar a Lisboa, la vecina Portugal y en esta ocasión, sonó la campana. Javier Ruiz y Uri Botello se han hecho con el título Challenger que se les resistía y que por trabajo y esfuerzo merecían.
En Portugal, ante los sorprendentes Rafa Méndez y Diego Ramos, han logrado su primer título conjunto como pareja (6-3 y 7-5).
En su camino a la final dejaban en primer lugar fuera a los actuales campeones de España, tarea nada fácil, para ya en cuartos eliminar a otra pareja también muy complicada, la formada por Lucas Campagnolo y Lucas Da Cunha, dos jóvenes brasileños llamados a grandes duelos esta y las próximas temporadas. Finalmente, en semifinales se deshacían de otros dos grandes favoritos, Nacho Gadea y Álvaro Cepero que, aun siendo una pareja formada solo para este torneo, llegaban con vitola de favoritos.
Así, tras un camino superando rivales muy complicados, llegaban a la última instancia, donde Méndez y Ramos se habían colado por meritos propios pero contra pronóstico, si bien salvo en el duelo de dieciseisavos que se les marchó a tres sets, en el resto no encontraron excesivas dificultades.
Al principio del duelo los problemas para mantener el saque fueron la nota común en ambas parejas, siendo el melillense Botello y el granadino Ruiz los primeros en tomar algo más de poso y conseguir el break que les lanzaría en pos del primer set. Una tímida ventaja que se ampliaría gracias al poderió de Ruiz por alto, arma muy utilizada tanto en semifinales como en la final.
Así, ya con el 4-1 galopando a su favor, se acomodaron mucho más en la pista, manteniendo su saque y no dejando que los rivales se aceraran más de lo estrictamente necesario, cerrando para ellos el primer set y poniendo la primera piedra del trofeo.
En el segundo el comienzo fue calcado, apretando desde el resto sacase quien sacase, pero ahora iban a ser Méndez y Ramos los que encontraron antes el equilibrio necesario para adelantarse. No obstante, lejos de dejar que las distancias se ampliaran, la pareja Kombat dio un paso al frente e igualaron el luminoso, alargando la paridad hasta el 4-4. Saque para Rafa y Diego que no pudieron conservar y 5-4 para Uri y Javi; los dos españoles, con uno de diferencia y saque a su favor, no supieron cerrar el partido, que se alargó unos minutos más, hasta que otra nueva rotura, esta vez sí lograda satisfactoriamente, subió a su marcador y puso el 7-5 definitivo y la alegría en su lado de la pista.
Un paso más en su consolidación, que les hace crecer otro poco y les sitúa como una de las parejas más en forma de lo que llevamos de año. Han demostrado que su unión trae frutos y ya miran al próximo torneo para seguir cosechando triunfos.
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