Cuando el pasado verano Alejandra Salazar se lesionaba y tenía que decir adiós a la temporada, Marta Marrero encadenó cinco finales y las perdió todas, una tras otra, y vivio su particular via crucis del que, ahora, por fin ha salido. Salazar está de vuelta y tras una semifinal en el torneo anterior, ahora ha llegado a la final y ambas han conquistado su primer título. Las ‘Fieritas’ están de vuelta.
El resultado (6-3 y 7-6) pone de manifiesto que tanto la madrileña y la canaria como Mapi y Majo Sánchez Alayeto desplegaron por igual juego y físico y que se dejaron las piernas para llegar a las bolas, resultando un partido que el público vivió con intensidad y con mucho entusiasmo, pues se volvían a ver las caras las dos parejas que más finales copan desde hace dos años.
Las números uno comenzaron con mucha intensidad, quizá queriendo cerrar el partido rápidamente para evitar sumar más desgaste tras el duelo maratoniano al que les obligaron Patty y Eli en semis, mientras que Marrero, muy ligera de piernas y muy fina físicamente sabía que alargarlo era precisamente lo que les daría algo de ventaja, máxime si Ale empezaba a encontrar sensaciones con su derecha.
Así, tras un pequeño intercambio inicial, tomaron la delantera las chicas de Juan Alday con un break que les puso en el camino del set hasta el 5-3, momento en que golpearon de nuevo para sorprender y hacer imposible el que las Atómikas pudiesen acercarse y devolverles la rotura de servicio.
Este primer golpe, lejos de acusarlo Mapi y Majo, les envalentonó aun más y entonces pudimos ver el verdadero cruce de golpes, el fuego cruzado, el pádel sin concesiones que las cuatro desarrollan y que se refugiaba en las voleas de Alejandra, las bajadas de pared de Mapi, los ángulos de Marrero y las bandejas de Majo. Como las cuatro buscaban su primer título del 2018, no se arrugaron y tras llegar parejas al quinto juego (2-2), fueron de nuevo Ale y Marta las que se encontraron con el break a favor para pasar al 5-3.
Sin embargo, aunque pudiera parecer el mismo guión, esta vez las mañas no se dejaron vencer tan fácilmente y fueron capaces de apretar para forzar el tie break cuando parecían sentenciadas (casta de números 1). Ahí, en la muerte súbita, Alejandra y Marta estuvieron mucho más acertadas y lograron reivindicar su buen momento de forma, haciéndose con la primera cita Open del año y dejando a las gemelas sin estrenarse aun en este 2018.
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