Aunque no comenzaron la jornada llenas, poco a poco las gradas del Estadio Nacional fueron cubriéndose de aficionados que quisieron vivir in situ las eliminatorias por entrar a la final, las cuales nos dejaron dos duelos bien diferentes pero con un denominador común: un pádel muy disputado.
Y es que este Portugal Padel Master tendrá el orgullo de quedar incluido en la lista de torneos que tendrá una final entre las parejas 1 y 2, un duelo que al más puro estilo fútbol, es ya todo un clásico, y que de nuevo, pondrá frente a frente a Fernando Belasteguín y Pablo Lima ante Paquito Navarro y Sanyo Gutiérrez.
Las dos parejas solventaron sus respectivos compromisos, aunque hay que decir que de maneras muy diferentes.
Y es que Paquito y Sanyo tuvieron que sufrir y remar para derrotar a los siempre rocosos y pegados a la pista Matías Díaz y Maxi Sánchez, una pareja a la que nunca puedes dar por sentenciada, ya que si te descuidas, te levantan el partido y te vas a casa con cara de tonto. Un resultado de 4-6, 7-5 y 6-4 refleja lo duro y disputado que estuvo. Tras la igualada en el inicio, Mati y Maxi consiguieron romper el servicio de sus rivales en el quinto juego, pero les devolvieron Paquito y Sanyo la moneda para poner el 4-4. Lejos de quedarse ahí, otro break y ahora sí, la consolidación, les dio la primera ventaja a la pareja nº3.
La segunda manga fue un constante devenir de intentos de break y de poner tierra de por medio por parte de unos y otros, y en ese caos terminó por reinar la magia de Sanyo y la solidez de un Paquito que consiguieron dos juegos seguidos y la igualada en el luminoso. Ya en el último, los hombres de Ramiro Choya conseguían su primera rotura de servicio, ventaja que les permitiría tomar con más calma la parte final del choque y, administrando muy bien la renta, lograban acceder a la final del torneo.
La otra semifinal fue mucho más asequible para los vencedores, casi un paseo militar de Bela y Lima ante Franco Stupaczuk y Cristian Gutiérrez (2-6 y 2-6). Ni el marplatense ni el chaqueño se encontraron, no supieron hilvanar su juego, los remates de Stupa no ofrecían la potencia que en otras ocasiones y la magia de Cristian se quedó en la varita.
Así, ante una pareja de la pegada y el desgaste que ejercen Bela y Lima, es harto complicado, máxime cuando Bela se encargaba de mover a los rivales y a la pelota al lugar que quería y Lima remataba la faena con bolas pesadas difíciles de levantar o golpeando con furia y tremenda potencia.
El primer juego sirvió para que los números 1 rompieran el servicio de Stupa y Cristian, toda una declaración de intenciones. Los hombres de Carlos Pozzoní intentaron por todos los medios conseguir revertir la situación pero no tuvieron ninguna opción y se dejaron llevar el resto del parcial hasta su conclusión con una bola desde la red de Bela, que cerraba el puño y se veía ya con medio pase en el bolsillo.
En el segundo, conforme pasaban los minutos, aumentaba el registro de errores y breaks en contra de la pareja nº4, que veía cómo se les iban escapando múltiples opciones y su presencia en el último escalón del torneo, escalón al que llegaron los ‘Depredadores’ con máxima autoridad y avisando que este domingo irán a por todas, buscando la revancha de la final perdida en Sevilla.
Duelo pues, de kilates, el que tendrán los aficionados que se den cita en la central del Estadio Nacional a partir de las 16:00 horas (hora local), momento en que se pondrá en movimiento la primera pelota de la final.
Fotos: World Padel Tour
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