El partido de Paquito Navarro y Sanyo Gutiérrez costó, y mucho. No por jugarse en dos sets fue menos duro, puesto que Cristian Gutiérrez y Franco Stupaczuk propusieron un guión de pelea y partido trabado, de ocasiones de victoria para ambos lados y también, de numerosos intercambios.
Y es que el andaluz y el argentino volvieron a necesitar de su mejor versión, mejor aun que en días anteriores, para derrotar a dos que ya saben lo que es ganar este año, y por partida doble: un veterano de talento infinito y un joven eléctrico que siempre levanta al público y que en esta ocasión no quiso ser menos.
Resultado de 6-3 y 7-5 para la dupla número 2 con un juego más controlado, sin tantos altibajos, algo que agradeció el público, volcado con ellos, y Ramiro Choya desde el banquillo. El choque comenzó, eso sí, muy parejo, afianzando cada uno de ellos el saque y manteniéndose dentro del partido, hasta que Paquito y Sanyo apretaron en el sexto juego y se pudieron por delante, situación que ya no abandonaron hasta el juego definitivo a su favor.
En el segundo, más de lo mismo, Navarro y Gutiérrez en la dinámica positiva que les hacía irse hacia arriba con suma facilidad, y Cristian y Stupa intentando recuperar lo perdido y demostrar que habían vuelto para pelearlo todo, que su pádel tiene ingredientes de sobra para pelear con los mejores del ranking y que sus dos títulos no fueron casualidad.
Lástima que todo su esfuerzo quedara al final solo en el reconocimiento del público y que no pudieran certificarlo, al menos, empatando la contienda. Con 5-5 en el luminoso, Paquito y Sanyo se crecieron y se hicieron con los dos siguientes juegos y con el billete a la gran final.
Fotos: World Padel Tour
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