Hubo que trabajar, y mucho, especialmente en la primera semifinal, para conseguir pasar a la final. Nadie dio un ápice de pista gratis y eso se tradujo en intensidad máxima tanto a la luz del Sol como al resplandor de la Luna de Mijas, enclave de gran belleza y mucho mejor pádel.
La semifinal mañanera enfrentó a los hermanos Díaz Sangiorgio, pádel argentino de tradición, pelea y magia, con Godo haciéndose acompañar de Lucho Capra y con Mati en el otro junto a Maxi Sánchez.
El choque estuvo reñido y hubo que irse a los tres sets (6-2, 3-6 y 2-6). Empezaron muy fuerte Godo y Lucho, poniendo revoluciones y acierto en el primer parcial, ofreciendo un juego sin fisura alguna ante el que sus oponentes no podían respirar, devolver bolas ni casi hacer puntos, pues desde el otro lado de la pista les llegaban golpes imposibles.
Los pupilos de Severino Iezzi entraron encantados en el banquillo para el cambio entre sets y ahí, parecieron reaccionar, pues salieron con otro ímpetu, siendo el ‘Guerrero’ y el ‘Tiburón’ que caracterizan, mordiendo y apretando y devolviendo la jugada de la intensidad.
Así, en dos parciales en los que dominaron y en los que Godo y Lucho notaron más el cansancio tras venir de jugar toda la semana anterior y un partido más en este Open de Mijas, Matías y Maxi apuntaron su nombre en la final, donde estarán en pos de pelear por algo que se les resiste a pesar de su calidad y que, con la supremacía de las parejas 1 y 2 este año llevan tiempo sin conseguir: un título.
La otra semifinal, por el contrario estuvo dominada por una pareja, la compuesta por Cristian Gutiérrez y Franco Stupaczuk ante Miguel Lamperti y Juani Mieres (6-1 y 6-2). Se mostraron muy regulares y, sobre todo acertados tanto Cristian como Stupa, cada uno en su faceta y especialidad, abortando las tímidas reacciones de Lamperti y sobrepasando en todo momento a un Mieres que, aunque no lo parezca, le queda un poco para llegar a su mejor versión y eso, a este nivel, se nota bastante.
La igualdad solo se reflejó al inicio de cada set, pues después Cristian y Stupa fueron dos apisonadoras que no dejaron que sus rivales hilvanaran juego, que los remates de Lamperti no tuvieran efecto alguno y que las voleas de revés de Mieres no se durmieran en el fondo de la pista.
Un partido muy completo de la magia de Gutiérrez, que dejó varios detalles de calidad como en él es habitual, y de la electricidad de Stupa llegando a bolas imposibles.
Ya tenemos, por tanto, una final, inédita por otro lado, entre la pareja número 3 del ranking, Matías Díaz y Maxi Sánchez y la dupla formada por Cristian Gutiérrez y Franco Stupaczuk que se está mostrando en un gran estado de forma. El duelo se disputará en cuanto termine la final femenina (que empieza a las 19:00 horas), por lo que no será antes de las 20:30 horas.
Fotos: World Padel Tour
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