Hubo que sudar, y mucho, y no solo por el calor reinante en Barcelona que a partir de hoy puede transformarse en lluvia y deslucir la prueba, sino por lo que hubo que correr para llegar a cada bola y conseguir vencer a los rivales.
La jornada de cuartos masculinos fue muy disputada, y especialmente complicada para dos de las parejas, necesitadas de su mejor versión para seguir jugando en la ciudad condal.
A los primeros que les costó fue a Paquito Navarro y Sanyo Gutiérrez. Andaluz y argentino se las vieron muy negras ante Godo Díaz y Lucho Capra, quienes lejos de amedrentarse por estar ante la dupla nº2, se vinieron arriba y les ganaron incluso el primer parcial. Con las alarmas sonando en el banco de Ramiro Choya, hubo que realizar varios ajustes para, en los dos sets siguientes, revertir la situación y conseguir el pase con algún apuro menos y gracias también al menor desgaste físico, ya que Godo y Lucho venían de jugar toda la semana anterior y ganar en Portugal (4-6, 6-3 y 6-3).
Más sencillo lo tuvieron Franco Stupaczuk y Cristian Gutiérrez, quienes parecen, ya por fin, con la máquina engrasada y funcionando a pleno rendimiento. Su pádel de potencia y toque sutil les está dando buenos réditos en Barcelona y, por el momento, se han plantado en semis, superando en esta ocasión a Maty Marina y al cañonero Miguel Lamperti (3-6 y 3-6)
Otros a los que les costó fue a Matías Díaz y Maxi Sánchez, en su caso ante Ale Galán y Juan Cruz Belluati, jugadores de cero complejos y pádel de recursos infinitos (6-2, 3-6 y 4-6). Sabiendo sobradamente que los duelos ante Mati y Maxi son siempre duros y correosos, Galán y Belluati pusieron la directa desde el inicio y su comienzo sorprendió a la pareja nº3, que se vio arrollada en un primer parcial en el que, toda vez que se vieron muy abajo, se dejaron llevar para ahorrar fuerzas. Desde que comenzó el segundo, estuvieron mucho más metidos y con Iezzi a los mandos, rebajaron sus errores no forzados y por ahí anduvo la clave. Eso sí, los jóvenes no se amilanaron lo más mínimo y pelearon hasta la última bola, demostrando, en toda una cita Master, que ya hay que tenerlos muy en cuenta.
Por último, Fernando Belasteguín y Pablo Lima estuvieron sumamente acertados y aunque se toparon con la técnica de Maxi Grabiel y la potencia de Agustín Gómez Silingo, supieron sacar adelante con maestría su duelo (5-7 y 3-6). No empezaron muy bien, eso es cierto, ya que sus rivales no les dejaron ni marcharse en el marcador ni realizar ese pádel de desgaste que tan buenos réditos les otorga, si bien desde el minuto uno el choque fue un auténtico espectáculo y el primer set se decidió en los instantes finales. Ya en el segundo, con medio partido en el bolsillo, los números uno demostraron su condición y supieron detener el conato de rebeldía de sus oponentes para evitar irse a un tercer set.
A partir de las 12 comenzará a rodar la bola en los duelos de semis. Mucha suerte a las cuatro duplas.
Fotos: World Padel Tour
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