Noticia que acaba de saltar a los medios de comunicación. El piloto asturiano, Fernando Alonso, abandonaba su asiento en el McLaren Honda visiblemente frustrado y decidía meterse en una pista de pádel para desconectar de los malos resultados cosechados.
Tal y como informan desde el diario Marca, el español se metía en su coche para la primera sesión de entrenameintos libres del GP de España y, tras rodar apenas una vuelta, rompía el motor y decidía, tras ver que los mecánicos tardarían mucho en reparar la avería, no salir en lo que quedaba de la sesión y enfundarse unos pantalones cortos y meterse en la pista.
Su frustración y decepción es evidente, puesto que el coche no acompaña a su gran motivación, por lo que se hacía acompañar de su fisio, Edoardo Bendinelli, y realizaba un partido de entrenamiento, tal y como él mismo publicaba en sus redes sociales, para mantenerse activo.
Su mensaje a la escudería era más que evidente y directo, está descontento con el comportamiento del coche y ahora queda a la espera de saber si podrá rodar en la segunda sesión de libres. Por el momento, el mundo del pádel sonríe por contar con un deportista de la calidad de Alonso ahora con una pala en las manos.
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